EL CHICO QUE ME GUSTA

Cuando entré a ese lugar, distraída, sin esperar que me ocurriera nada especial, ahi estaba Él.
Alto, delgado, no tiene demasiados músculos, la piel perfecta, el pelo cruzandole con gracia la frente, su miradaa.. me dejo petrificada. Y ese, que tal vez era mi peor día, se transformó en un día perfecto. De inmediato sentí que mis pies se elevaban varios centímetros del suelo. Hubiera querido decirle:
AQUI ESTAS, FINALMENTE, ERES HERMOSO, ¡AY QUE ME HAS HECHO!, ACERCATE, ABRAZAME.. ¡AMOR!